Un thriller bastante flojo debido, especialmente, a la actuaciòn de los dos policìas. El jefe, por añadidura, psicòlogo, pretende resolver los interrogantes del caso que enfrenta mediante ejercicios mentales, al estilo "vidente". Alguien se olvida, que sobre todo en la realidad, lo que priman son los "hechos", que es lo que hay investigar y probar y no "adivinar". Igual que en la ciencia, en los asuntos policiales siempre debe formularse una o varias "hipòtesis" y posteriormente realizar la contrastaciòn de las mismas, hasta resolver los casos.
Por otra parte, el segundo policìa es realmente pèsimo en su rol, lo ùnico que sabe es gritar, sufriendo, aparentemente, de una enorme hiperventilaciòn. Y màs encima, trata de presumir de "inteligente", al expresar unos pensamientos que dan pena, para ser adulto. Y, lejos, con enorme ventaja, el mejor actor es el criminal, que, efectivamente, parece un verdadero profesional al compararlo con los dos ineptos detectives.
En sìntesis, una cinta màs que no agrega nada nuevo al gènero; al contrario, lo desmerece y perjudica dada su poca calidad.